El calor es posible definirlo como
energía transferida entre dos cuerpos o sistemas, se puede asociar al movimiento de los
átomos,
moléculas y otras partículas que forman la materia. El calor puede ser generado por
reacciones químicas (como en la combustión),
reacciones nucleares (como en la fusión nuclear de los
átomos de
hidrógeno que tienen lugar en el interior del
Sol), disipación electromagnética (como en los hornos de microondas) o por disipación mecánica (fricción). Su concepto está ligado al
Principio Cero de la Termodinámica, según el cual dos cuerpos en contacto intercambian energía hasta que su
temperatura se equilibre.
El calor puede ser transferido entre objetos por diferentes mecanismos, entre los que cabe reseñar la
radiación, la
conducción y la
convección, aunque en la mayoría de los procesos reales todos los mecanismos anteriores se encuentran presentes en mayor o menor grado.